«Urbanismo es una caja negra donde no se sabe lo que pasa»

Empieza a manejarse con los asuntos municipales, aunque muy por encima. Sí tiene claro quién es su objetivo y no pierde la ocasión para cargar contra el alcalde, Luis Díaz Alperi, de quien dice que las imputaciones judiciales que arrastra deberían haber sido suficiente para que no aspirase a la reelección. Etelvina Andreu no se explica cómo se arma tanto revuelo con su doble condición de subdelegada y candidata y nada pasa con que Ripoll o Alperi también aspiren a la reelección y nadie plantee sus dimisiones. La aspirante también habla de su candidatura, más bien la esquiva, pero no descarta, ni mucho menos, que personas no militantes ocupen puestos en la próxima lista municipal.- ¿Qué hará con el Plan Rabasa si gana las elecciones?- Hay dos posibilidades: una, que vuelva a recaer en el Ayuntamiento la posibilidad de aprobarlo, y otra, que no. Si, al final, la Comisión Territorial de Urbanismo lo aprueba, no podremos dar marcha atrás en el tiempo. Ahora bien, si volviera a estar dentro del Ayuntamiento, le puedo decir que la prioridad será desarrollar el Plan General y no ese plan parcial.- El alcalde dice que Rabasa resolverá el futuro de muchos jóvenes, facilitando el acceso a la vivienda.- El Plan Rabasa hipoteca el desarrollo de la ciudad para los próximos quince años. El problema es la contradicción del Partido Popular: retrasa sine die el Plan General, que es un proceso participativo e integral de la ciudad, y se dan mucha prisa con Rabasa.- ¿Por qué no le gusta el proyecto?- Es un megaplan parcial, 15.000 viviendas, 60.000 alicantinos más, y con la ley actual podría hacer más casas.- ¿Tiene alguna pista sobre los informes pendientes, entre ellos el que afecta al Gobierno central, a través de la Confederación Hidrográfica del Júcar?- No soy adivina para saber cómo van a quedar los informes, pero, desde luego, si volviera a ir al Ayuntamiento, aprobaríamos primero el Plan General, en el caso de que gobernáramos los socialistas.- Muchos de los opositores confían en el análisis de la Confederación Hidrográfica.- Si el informe dice, como nosotros defendemos, que el Plan Rabasa es inviable e insostenible, y está en nuestras manos votarlo, no irá adelante. Porque, ¿cómo se puede desarrollar un plan si un organismo dice que no hay agua suficiente para llevarlo a cabo o si Fomento te dice que no hay accesos suficientes? Las decisiones las toman los políticos, pero los informes los realizan los técnicos, aunque sean los políticos quienes tengan la última palabra. Un buen gestor tiene que hacer caso a las limitaciones técnicas.- Sabe que el Plan Rabasa y su oferta de viviendas será una de las banderas del candidato Alperi.- Hacen falta más viviendas en Alicante, sobre todo muchas más de VPO. El PSOE no se opone al crecimiento de la ciudad, pero nunca podremos defender que se desarrollen a golpe de especulación, con una maniobra que podrá ser legal, pero no me parece ética, como es retrasar el Plan General para hacer las cosas a golpe de plan parcial.- Soterramiento. ¿Se hará?- Sí, se hará, sin duda._ ¿Cuándo?- Ahora mismo le digo a los alicantinos cómo está el tema: el proyecto de la estación tiene que estar entregado por la empresa antes de diciembre. Sin embargo, las obras no comenzarán hasta que no haya pasado por el Pleno municipal el acuerdo necesario de Urbanismo, que, como siempre, o se equivocará o lo hará tarde. Está desde mayo en manos del Ayuntamiento, y se espera a septiembre u octubre para empezar a poner alegaciones sobre si ahora hay que tirar el Puente Rojo y otras cuestiones. No hay seriedad.- El alcalde dice que lo que no hay es voluntad política del Gobierno, que está boicoteando a la ciudad.- En los Presupuestos Generales del Estado hay dinero para empezar las obras en el momento en que se presente el proyecto, que será en diciembre. A principios del año se publicará la licitación y empezará. La voluntad del Gobierno es que se haga. Sin embargo, de nuevo un trámite burocrático de un ayuntamiento que debería tener como prioridad el proyecto, lo retrasa todo en Urbanismo, que es como una caja negra, donde no se sabe lo que pasa.- No pierde la ocasión para atacar a su oponente. ¿Hay algún proyecto que comparta con el alcalde?- Hombre, el Palacio de Congresos. La decisión final de hacerlo en Sangueta la compartimos. Entiendo la clara necesidad del edificio y la ubicación no me parece mal. Me da lástima que el alcalde llegue a ese consenso con diez años de retraso.- Otra vez a la carga.- Hemos perdido diez años valiosísimos, en los que el resto de ciudades del entorno se han desarrollado en ese aspecto y en los que nosotros hemos perdido el tren. Nos va a costar un esfuerzo extra subirnos de nuevo a ese vagón por la cabezonería de ese señor con el monte Benacantil y su obsesión por encajarlo ahí.- Subdelegada y candidata. ¿No cree que genera confusión? ¿Hasta cuándo?- Ni un día, ni un minuto, ni medio segundo en situación de incompatibilidad. En cuanto a la fecha, en el momento en que la campaña empiece, y no me refiero a los últimos quince días, sino a los dos meses y medio antes, o por ahí. Los partidos proclaman candidatos, pero hasta que el representante legal del partido no lo formalice en el juzgado, nadie es candidato. No sería la primera vez que uno caiga antes de presentar la lista en el juzgado, aunque no será este caso.- Yo he conocido cómo se ha cambiado una candidatura en un coche, camino del juzgado.- Espero que éste no sea nuestro caso. Será a partir de ahí cuando haya candidaturas oficiales. Mediáticamente, la campaña se está alargando en el tiempo mucho más allá de lo debido. Empezamos muchos antes, es importante darse a conocer y es verdad que hacemos entrevistas siendo sólo candidatos oficiosos.- ¿Cree que le puede perjudicar que no se transmita con claridad si usted habla como subdelegada o como candidata?- No lo creo. En cualquier caso, si mi partido o el delegado del Gobierno juzgaran que debería haber otra persona, no tendría empacho en volver a mi sitio. Soy funcionaria, todos los subdelegados somos funcionarios, de grupo A y estamos en servicios especiales, por lo que nos reincorporamos el mismo día en que dejamos el cargo.- Parece claro que no hay dudas legales, pero le está dando una baza al gobierno local para arremeter contra usted.- Me resulta extraordinario la expectativa que se levanta cuando nadie le dice al presidente de la Diputación si va a seguir siéndolo, cuando a lo mejor aspira a repetir en el cargo. Y supongo que aspirará a ir por la lista de Alicante, y nadie lo ve incompatible, ni que, por supuesto, un alcalde siga en el cargo mientras aspire a la reelección, ni nada por el estilo. Es una polémica creada artificialmente por las personas que creen que tienen que atacarme con razón o sin ella.- ¿Va a propone un cara a cara con el alcalde?- Estoy abierta al debate. Pienso que es una norma que los demócratas deberíamos tener. No creo que sea la solución al cien por ciento, pero creo que contribuye mucho a que un ciudadano pueda tener una opinión informada, con razones, de por qué debe votar a una persona u a otra. Es un formato en el que hay muchos más factores que las puras razones, pero pienso que es una buena herramienta.- No lo descartamos.- Por mi parte, no. Me gustaría que se pudieran organizar debates. - ¿Qué cree que le puede pasar una factura mayor al alcalde: su gestión y el desgaste propio de doce años, su...- (Interrumpe). Su gestión.- Espere, que no he acabado. Le decía: su gestión, las imputaciones pendientes de resolver en dos juzgados o la crisis interna que han escenificado durante los dos últimos años.- Las tres cosas, francamente. El desgaste, y no porque doce años desgasten, que a lo mejor también, porque creo que largos periodos de mandato conllevan una pérdida de empuje y de ilusión inherente al tiempo. Pero, en este caso, se trata de su gestión durante doce años, que es vacía para la ciudad, y, particularmente, la de los últimos cuatro años, que ha sido inoperante. - ¿Y los juzgados?- Las imputaciones crean argumentos suficientes para que ese señor no se volviera a presentar, por decencia democrática. Me maravilla que el señor Camps mantenga a este candidato. La política del PP está condicionada no por el interés de los ciudadanos, sino por mantener los precarios estados de poder que tienen. Y así, el señor Camps, con tal de que los zaplanistas no asuman el control de Alicante, sigue apostando por una persona que tiene varias causas abiertas.- ¿Conoce los nervios que hay en su grupo municipal, en el del PSOE me refiero, sólo con mentar la palabra candidatura?- Hombre, hay nervios... no sé si hay nervios, pero todas las situaciones de cambio hacen que la gente a lo mejor se ponga nerviosa o se preocupe por su devenir. En cualquier caso, el grupo tiene una labor muy importante por delante durante los próximo seis o siete meses de legislatura: hacer una oposición a Alperi firme, sensata y razonada. Es una labor importante que les debería llevar el cien por cien de su tiempo.- Pues pregunte, pregunte en el grupo.- Las listas en nuestro partido no se van a abordar hasta finales de enero o febrero. Mientras tanto, vamos a estar trabajando en varias direcciones: en hablar y escuchar a los ciudadanos. Estamos elaborando el programa electoral. Tenemos nuestras bases, pero queremos recoger los intereses de los ciudadanos, pero no de uno o dos. Es lo fundamental. - Eso está muy bien, pero ¿qué me dice de la candidatura?- He dicho que va a ser una candidatura de gobierno. Las personas que estén en esa lista, hayan tenido o no responsabilidades municipales, han de poseer un perfil, tanto por su capacidad de gestión como por sus conocimientos, que hagan creíble el proyecto. Es normal que se pongan nerviosos.- Al grano,¿habrá caras nuevas e independientes?- Habrá aquellas caras que, pertenezcan o no al PSOE, lleven detrás a las personas capaces de acoplarse a los perfiles que necesitamos para gobernar. El PSOE tiene algo muy importante en su haber, que es esa fuerza y potencial de sus 1.400 afiliados. Hay muchísima gente capaz para desarrollar infinidad de puestos como el de concejal. Pero también somos conscientes que fuera del partido tenemos muchos simpatizantes, gente de gran valía que puede integrar la candidatura. Quiero una lista que haga pensar a los ciudadanos que presentamos un equipo de gobierno, y no sólo por la número uno.- ¿Sabe que en su grupo, unos como otros, califican lo que pasó en febrero como un «golpe de estado», con el cambio de portavoces municipales?- Me parce desafortunada una expresión como ésa. Soy bastante joven pero sí que recuerdo el golpe del 81. Ni mentarlo. La situación vivida en febrero no es deseable en ningún sitio, siempre sería mejor un equipo y una línea únicos durante los cuatro años, pero me parece que fue necesario y a las pruebas me remito. Fue el principio para poder presentarnos hoy ante los alicantinos como un partido unido, con un secretario general al frente, que es el más votado de la historia, con una candidata refrendada por unanimidad por la ejecutiva local. Quizás los principios tienen que ser duros. Para los socialistas y para los alicantinos ha sido positivo. Hemos pasado por un año de gestora, muy bien llevado por Antonio García Miralles, con esa labor de unión. Visto el resultado final, ha valido la pena. Ahora sólo pensamos en Alicante. Y esa tranquilidad de espíritu bien merece algún trago amargo.